¿Qué es la prostatitis?
Consiste en la inflamación, poco frecuente y potencialmente grave, de la glándula prostática, la cual está situada debajo de la vejiga y delante del recto, y cuya secreción protege a los espermatozoides, y evita el paso del contenido de la vejiga durante las relaciones.
¿Por qué se inflama la próstata?
Entre las posibles causas se encuentran:
+ Llegada de gérmenes (bacterias fundamentalmente) a la próstata a través de la uretra o por vía sanguínea.
+ Estrechamiento de la uretra y del cuello o de la pared de la vejiga.
+ Por paso de parte de la orina hacia el interior de la glándula prostática.
+ Por la alteración del retorno venoso (por hemorroides o varicocele).
+ Por respuesta del sistema inmunitario producida por las propias bacterias o por la orina.
En el caso del origen infeccioso de la misma, las enterobacterias (Escheria Coli) suelen ser los agentes más frecuentes en los casos de prostatitis agudas, pudiendo también estar implicados gérmenes de transmisión sexual como las tricomonas y las chlamydias, estas últimas serían, también tras las enterobacterias, el germen más frecuente en las prostatitis crónicas.
Manifestaciones clínicas de la prostatitis
La inflamación de la glándula prostática puede originar sintomatología urinaria, sexual y perineal.
Entre la clínica urinaria tendríamos el dolor miccional, la dificultad para orinar, la urgencia miccional y pueden cursar con retención aguda de orina.
El síntoma más frecuente, junto a los trastornos urinarios, es la presencia de dolor perineal que puede irradiarse hacia el pubis, pene, escroto, cara interna de muslos y región lumbosacra.
La prostatitis también puede cursar con sintomatología sexual como disminución de la libido, eyaculación dolorosa, pérdida de la erección, y puede haber, presencia de sangre con el semen.
Aunque no hay una manifestación clínica específica, las formas agudas cursan con fiebre, mal estado general, disuria, dolor perineal espontáneo o con la micción, y en ocasiones retención aguda de orina.
Prostatitis y fertilidad masculina
Sobre un 15 % de los casos de infertilidad masculina están asociados con infecciones de las vías y órganos reproductores masculinos.
El líquido prostático nutre y protege a los espermatozoides, por lo que la inflamación prostática facilitará alteraciones en la producción espermática y en el transporte de los mismos, pudiendo llegar a producirse una azoospermia obstructiva.
En las prostatitis crónicas, se aprecia una mayor producción de especies reactivas del oxígeno y una menor capacidad antioxidante, lo que produce daño en la estructura de la cromatina y en la membrana plasmática espermática.
Un buen estudio diagnóstico y el correspondiente tratamiento adecuado, en función del agente causal, debe permitir la mejora en la calidad seminal.
Firmado: D. José Mª Martín Vallejo (Especialista en Obstetricia y Ginecología, nº colegiado 464619238. Experto en Reproducción Asistida / Miembro de la Sociedad Española Fertilidad).