Coronavirus y reproducción asistida, dos temas que vamos a tratar en profundidad en este blog. Comenzaremos con un repaso inicial a las características principales de esta infección vírica que asola el mundo y acabaremos centrándonos en el apartado de la reproducción asistida.
¿Qué es el coronavirus?
A finales de diciembre de 2019, las autoridades sanitarias de Wuhan (China) informaron sobre una serie de casos de neumonía (inflamación de los pulmones, que en este caso cursaron preferentemente con fiebre, tos y dificultad respiratoria) de etiología desconocida, y con un contacto común en un mercado mayorista de la ciudad de Wuhan.
A primeros de enero de 2020 se averiguó que la causa del brote es un nuevo coronavirus (familia de virus que normalmente afectan sólo a animales, aunque en ocasiones pueden transmitirse a las personas), el SARS-CoV-2 (la comunidad internacional lo ha denominado como COVID-19).
El período de incubación (tiempo comprendido entre la exposición al virus y la aparición de la sintomatología) es de unos 5 días (con un rango de 2 a 14 días), afecta, sobre todo, a personas de entre 30 y 80 años, y es poco frecuente en los menores de 20 años. El 80 % de los casos presenta síntomas leves (resfriado común), un 15 % síntomas graves (insuficiencia respiratoria) y un 5 % con síntomas críticos (con un 50 % de fallecimientos en este grupo).
Parecer ser una enfermedad que puede transmitirse entre animales y seres humanos (zoonótica), pero no se conoce el origen de la infección. La infección de una persona a otra persona se realiza a través de gotas y secreciones respiratorias procedentes de la tos o estornudos de una persona, que son inhaladas por las personas que están situadas a menos de 2 metros de distancia. La complicación más frecuente es la neumonía.
Principales medidas para evitar el contagio
Entre las principales medidas que se han recomendado para evitar el contagio por esta pandemia (epidemia que afecta a más de un continente y en el que los casos de cada país son provocados por trasmisión comunitaria) se encuentran: lavarse las manos de manera regular con un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón (si nos tocamos la cara, de forma inconsciente, con las manos limpias, reduciremos el riesgo), al toser o estornudar hacerlo sobre la cara interna del codo, mantener una distancia de seguridad de 2 metros con otras personas, desinfectar las superficies de uso común (soluciones diluidas de un agente clínico, como el alcohol o la lejía, ya que existe evidencia de que los coronavirus se inactivan en contacto con una solución de hipoclorito sódico con una concentración al 0,1%, etanol al 62-71% o peróxido de hidrógeno al 0,5%, en un minuto).
¿Qué medidas tomar si somos portadores del virus?
A su vez, si somos portadores asintomáticos del virus (podemos transmitir el virus, pero no tenemos síntomas), es recomendable el uso de mascarillas que evitarán que nosotros contagiemos a nuestros contactos, siendo este colectivo de portadores asintomáticos uno de los principales grupos a testar (test masivos, tanto para detectar el antígeno viral, como para detectar la inmunidad que va dejando) para poder acabar con la situación de aislamiento masivo en la que se encuentra el grueso principal de la población española.
¿Existe tratamiento para el Covid-19?
En estos momentos no existe un tratamiento específico frente al Covid-19, y con la orientación de tratamientos previos para otros coronavirus, se están empleando de forma experimental los antirretrovirales, hidroxicloroquina (antipalúdico), azitromicina (antibiótico), corticoides (potentes anti-inflamatorios) y los inmunomoduladores (moduladores del sistema inmune) así como el tratamiento sintomático de soporte que van precisando los enfermos en cada momento.
Tratamientos de reproducción asistida en tiempos de coronavirus
Por lo que hace referencia a la reproducción asistida resaltaremos los siguientes aspectos. El 15 de marzo de 2020, la SEF (Sociedad Española de Fertilidad), junto a la ESHRE (Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología) y la ASRM (Sociedad Americana de Medicina Reproductiva), debido a la pandemia del Covid 19, recomendó que los centros de reproducción asistida se consideraran servicios esenciales «únicamente ante procesos programados o ya iniciados», debido a fundamentalmente a tres situaciones: desconocimiento existente en ese momento sobre la influencia del virus en el campo de la reproducción, el avance de la epidemia por coronavirus y la necesidad de cumplir el estado de alarma ordenado por la autoridad sanitaria.
Tras 6 semanas de estado de alarma en España parece iniciarse la estabilización de la pandemia, lo que junto al desbloqueo de la mayoría de las UCI (Unidades de Cuidados Intensivos), no pareciendo que se vayan a precisar los recursos médicos de los centros de reproducción para la atención a la población general, son los motivos por los cuales se está planteando una vuelta paulatina a la actividad normal.
A su vez recordemos que en España hay una tendencia importante al retraso de la maternidad lo que condiciona que las cifras de esterilidad en nuestro país asciendan a un 20% de la población en edad fértil, lo que afecta a la calidad de vida y a la salud emocional de los que la sufren.
Finalmente, y relacionado con lo anterior, conocemos que la edad de la paciente es el factor pronóstico más importante en los resultados de los ciclos de reproducción asistida, por lo que un retraso en la realización de los mismos tiene un perjuicio directo sobre la posibilidad de embarazo y recién nacido vivo.
Por todos los motivos expuestos, la SEF, tras revisar la bibliografía existente al momento actual, cree que se deben tener en cuenta los siguientes apartados:
- El BOE (Boletín Oficial Estado) no hace referencia a situaciones excepcionales y urgentes como la criopreservación de ovocitos o corteza ovárica, necesarios para las pacientes (mujeres y hombres) en tratamiento citostático o quimioterápico por motivos oncológicos.
- Ningún organismo sanitario europeo ha desaconsejado el embarazo espontáneo.
- No se aprecian riesgos para la realización de las técnicas de Reproducción Asistida, ni para usuarias ni para embriones, ni para los embarazos producidos durante la pandemia, dado que no se ha encontrado virus ni en semen, ni en líquido folicular, ni en secreciones vaginales o uterinas.
- Los laboratorios de reproducción humana asistida ya disponen de protocolos de actuación para enfermedades infectocontagiosas de acuerdo a la normativa vigente.
- La actividad en los centros de Reproducción se adapta a los criterios de seguridad que hasta ahora se realizan en el resto de las consultas hospitalarias abiertas.
- Frente a las parejas que pueden conseguir el embarazo espontáneo, esta situación de inactividad en los centros de reproducción está discriminando a parejas de mujeres y mujeres sin pareja masculina o aquellas pacientes cuyo marido es azoospérmico (ausencia de espermatozoides en el eyaculado), en sus derechos reproductivos, dado que es imposible el embarazo natural durante el periodo de alarma.
- Aunque hay un perjuicio general de todas las pacientes, existe un grupo donde se pone en peligro su futuro genésico formado por mujeres de más de 35 años o con baja reserva ovárica que ven como disminuyen sus posibilidades de gestación un 2% cada mes.
Por estas circunstancias expuestas y dado que la infertilidad es una enfermedad en la que el tiempo influye de manera decisiva en el potencial reproductivo de muchas pacientes, la SEF y los profesionales que la integramos opinamos que debe realizarse un enfoque realista de la situación y favorecer de forma razonada y basada en la evidencia, que se reanuden los tratamientos de reproducción asistida.
Firmado: Dr. José Mª Martín Vallejo (Especialista en Obstetricia y Ginecología, nº colegiado 464619238. Experto en Reproducción Asistida).